Como Ayudar A Un Niño Con Autismo En La Escuela?

Como Ayudar A Un Niño Con Autismo En La Escuela
5 consejos para trabajar con niños con autismo

  1. 1 Proporcionarles una agenda que anticipe todo lo que va a ocurrir en los próximos 45-60 minutos.
  2. 2 Evitar, en medida de lo posible, estímulos sonoros.
  3. 3 Establecer un momento ‘de saludo’
  4. 4 Trabajos en mesa repetitivos.
  5. 5 El docente debe adaptarse al alumno y no al revés.

¿Qué actividades se pueden trabajar con niños autistas?

¿Cómo ayudar a socializar a un niño con autismo?

¿Cómo controlar a un niño con autismo?

En uno de nuestros artículos anteriores , hablamos sobre el significado, la detección y por qué se producen las “famosas” estereotipias en los niños que presentan Trastorno del Espectro Autista (TEA). Con el siguiente artículo queremos seguir hablando de este tema, explicando, desde el enfoque de la integración sensorial, como se pueden regular las estereotipias en niños con autismo.

  • – Muchos de nuestros «papás» nos preguntan acerca de estos comportamientos y/o movimientos;
  • Son conscientes de que son un signo “típico” de los niños con TEA, pero aun así se preguntan, ¿Cómo podemos ayudarle a reducir, eliminar o regular las estereotipias en niños con autismo? Desde el enfoque de la integración sensorial, ayudamos al niño a reemplazar ese patrón de comportamiento por otro más apropiado y funcional;

Es decir, se ofrecen estrategias que le enseñarán comportamientos alternativos que están diseñados para dar al individuo una satisfacción similar a la de la autoestimulación. Como se mencionó en el artículo anterior , es recomendable trabajar estos comportamientos debido a que interfieren con la atención, las relaciones sociales, y por consecuencia en el aprendizaje. Por lo tanto, a continuación, se citarán diferentes maneras de realizar una buena Intervención y así poder regular las estereotipias en niños con autismo :

  1. En primer lugar, hay que estudiar el contexto.
  2. Hacer un registro del lugar y las horas en las que esa estereotipia aparece.
  3. Saber o conocer qué cosas o situaciones le pueden producir un mayor nivel de excitación que conduzca al niño a la aparición de estereotipias. De modo que cuando aparezcan, estaremos preparados para intervenir en el momento oportuno. Eliminar las cosas que le estresan reducirá su necesidad de estimulación.
  4. Formar parte de la estereotipia y desviarla a otra acción. Es decir, interactuar con el niño en el momento que ésta se produce. Seguimos dando una respuesta regulatoria al niño, pero orientada a una interacción social. Por ejemplo: si agita las manos o da palmadas, puedes ofrecerle algo que se las mantenga ocupadas.
    • Son altamente reforzantes y hacen menos atractivos los refuerzos que se les puede ofrecer externamente de cara a alcanzar otro tipo de conductas más adaptativas;
    • Si le gusta saltar, apuesta por un paseo a buen ritmo;

    Intenta llevar contigo alguno de sus objetos o juguetes preferidos para que pueda servir de distracción en un momento dado.

  5. Proporciona un momento específico de «estimulación». Dedica un «momento de estereotipias» dentro de la rutina diaria de la persona con TEA. Enséñale cuándo, dónde y durante cuánto tiempo hacerlo. Esto ayudará a reducir la «estimulación» inadecuada. Por ejemplo: cuando tenga sobrecarga sensorial puedes proporcionarle entre 10 y 15 minutos de estimulación.
  6. Disminuir las exigencias adaptándola a sus capacidades, posibilidades o a su disposición.
  7. Proveer un estímulo compensador , como caricias, sonidos, movimientos, etc. Cualquier estímulo que el niño esté buscando nos va a ayudar a regular las estereotipias en niños con autismo.
  8. Enriquecer con estímulos apropiados el ambiente poco estimulante.

Por último, decir que es importante tener presente que no lo hacen a propósito y cargarnos de paciencia. Modificar un hábito necesita tiempo y constancia. Si nos enfadamos, le reñimos o presionamos interiorizará que esa estereotipia es algo malo y, al no poder controlarlo, experimentará inseguridad y frustración lo que, a su vez, intensificará aquello que tratamos de evitar.

¿Qué colores no toleran los autistas?

El infinito arco iris – En los últimos años desde la comunidad de personas con autismo ha existido un movimiento de rechazado a los símbolos clásicos de la pieza de puzle y el color azul. Al mismo tiempo estas personas se han sentido más identificadas con un nuevo símbolo, el símbolo del infinito con el color del arco iris.

¿Qué juegos les gusta a los niños autistas?

Regalos ideales para niños con autismo de acuerdo a la edad –

  • De 1 a 3 años: Las mejores opciones para los niños de estas edades son proyectores de pared, juegos que tengan luces y música , bloques de madera o plástico, columpios y juegos para empujar.
  • De 3 a 6 años: En esta edad les gustan las bicicletas, patines, triciclos, brincolines, burbujas, montables, casas de muñecas con personajes , cuentos que tengan sonidos e ilustraciones y juguetes que empleen agua.
  • De 7 a 12 años: Les encantan los carros con control remoto, papalotes, bicicletas, pistas de autos, muñecas que se puedan vestir, robots , cuentos con dibujos y pocas letras.

A modo general, los niños con autismo prefieren los juegos que tengan movimientos repetitivos, rompecabezas , donde puedan construir figuras. Cabe destacar que prefieren actividades individuales, donde puedan pasar horas en una sola tarea. La idea es elegir un regalo que se adecue no solo a sus necesidades si no también a los intereses del niño, buscando también promover su desenvolvimiento y desarrollo cognitivo. Como Ayudar A Un Niño Con Autismo En La Escuela.

¿Cómo llamar la atención de un niño con autismo?

Estrategias para la atención de niños y niñas con características Autistas – Posted on enero 13, 2012 by René Medina B Afecta significativamente la comunicación verbal y no verbal, la interacción social y un repertorio marcadamente restrictivo de actividades e intereses. Características principales

  • Tiende a permanecer ajeno al medio, absorto, poco interés en las personas y en las cosas que haya a su alrededor.
  • En ocasiones se muestra muy irritable y llora constantemente sin ninguna razón aparente.
  • Aparenta ser sordo debido a su falta de interés en las personas y el lenguaje, falta de sonrisa social.
  • Presenta movimientos extraños y repetitivos (estereotipias)con las manos, los ojos, la cabeza o todo el cuerpo, por ejemplo, el aleteo con las manos, balancear su cuerpo).
  • El juego, la imitación, los gestos comunicativos, no llegan a desarrollarse o se pierden progresivamente.
  • Problemas persistentes en la alimentación, falta de sueño, excitabilidad difícil de controlar, miedo anormal a personas y sitios extraños.
  • Resistencia a los cambios de ambientes y rutinas habituales, reaccionando a ellos con fuertes rabietas y tratando de evitar cualquier clase de cambios.
  • Tendencia a permanecer aislado, no mirar a las personas y evitar o ser indiferente a sus abrazos y mimos, etc.
  • Fijación por algunos objetos o cosas que llaman su atención.
  • En ocasiones llega a decir palabras repetitivas o sin sentido, aprenderse e imitar anuncios de comerciales, hablar en tercera persona, permanecer sin habla o desarrollar con lentitud un lenguaje funcional.
  • Frecuentemente no comprende más que órdenes simples o rutinas muy repetidas.
  • Puede permanecer largo tiempo realizando unas mismas acciones repetitivas, sin juego ni conductas de exploración.
  • Puede presentar autoagresión.
  • Requieren de aceptación, firmeza y comprensión.

Estrategias de Atención

  • Trabajar con él durante períodos cortos y prolongarlos poco a poco.
  • Fomentar un ambiente del aula estructurado, anticipando al menor las actividades a desarrollar.
  • Brindarle un mayor número de experiencias variadas y motivarlo hacia el aprendizaje con alegría, con objetos llamativos y de su interés.
  • Ayudarle y guiarle a realizar la actividad hasta que lo pueda realizar sólo.
  • Fomentar el interés por los objetos y las personas que lo rodean.
  • Ofrecerle muchas oportunidades de éxito y conducirle a explorar situaciones nuevas.
  • Ignorar, en la medida de lo posible, los berrinches o rabietas ya que son una medio para obtener o evitar algo. Establecer pautas para obtener algo y asegurarse que cumpla la orden que provocó el berrinche, una vez superada la crisis.
  • Utilizar estrategias para la modificación de la conducta como: «tiempo fuera», o el «no» contundente.
  • Para atraer su atención se le debe repetir frecuentemente su nombre y «mírame», buscar constantemente el contacto visual.
  • Después de realizar una actividad procure brindarle siempre un refuerzo (aplausos, abrazo, elogio, etc.
  • Para que logre ejecutar actividades en la mesa, debe establecerse primero el repertorio básico para el aprendizaje (permanecer sentado, mirar a los ojos, manos quietas).
  • Al planear, tomar en cuenta que una actividad que le agrade al niño, puede reforzar una actividad que le guste menos.
  • Aprovechar los hechos que ocurren a su alrededor y su utilidad para fomentar los aprendizajes en el aula.
  • Secuenciar las actividades de lo fácil a lo difícil.
  • Planear actividades donde el menor tenga un rol principal y que fomenten su interacción con sus compañeros y adultos.
  • Es importante se firme y constante en las conductas y aprendizajes que se quieren lograr, ya que el niño puede ser muy hábil y acabar manejando la situación.
  • Los factores claves con niños con características de este tipo, son el afecto, la firmeza y una muy buena planeación de la clase, con las adecuaciones necesarias para el menor.

Fuente: Estrategias de atención para las diferentes discapacidades. Manual para padres y maestros. Angélica L. Cardona Echaury. Reimpresión 2007. Editorial Trillas. Filed under: Para Educadoras |.

¿Que no les gusta a los niños con autismo?

Interpreto el lenguaje literalmente – Un niño con autismo tendrá dificultades para poder entender el lenguaje con sarcasmo o con doble sentido. Además, los juegos de palabras, los matices, las metáforas , las alusiones… tampoco son adecuados para hablar con un niño con autismo porque lo interpretará de forma literal haciéndole sentir muy confundido. Como Ayudar A Un Niño Con Autismo En La Escuela.

¿Por qué gritan los niños con autismo?

Muchos niños con Trastorno del Espectro Autista utilizan una jerga durante sus juegos que sustituye al habla. Antes de darse el habla, los bebés balbucean como modo de “entrenamiento” vocal. Estos juegos vocales se irán desvaneciendo para dar paso al habla con significado, con palabras y frases con sentido, pero, ¿por qué un niño de 4 años sigue utilizándola? – Los bebés empiezan a balbucear en repetidas ocasiones, (bababa, dadada, etc.

) durante sus propios juegos vocales. Es una manera de jugar y “practicar el habla”, como un entrenamiento para lo que vendrá a ser el habla propiamente dicha, pero estos balbuceos carecen de sentido, es decir, no contienen palabras con significado.

Los niños juegan a abrir y cerrar sus bocas, mover sus lenguas de un lado a otro… normalmente acompañados de movimientos corporales, golpeando y sacudiendo los objetos mientras balbucean en cadencia. Estas actividades de juego vocal son importantes para el desarrollo del lenguaje.

Algunos niños con autismo suelen producir largas cadenas de sonidos sin sentido e ininteligibles. A esto se le llama “jerga”, la jerga del autismo : una jerga a veces, muy elaborada. Podemos decir que el niño está tratando de expresar algo, ya que la jerga del autismo normalmente se produce con un patrón de entonación similar al del adulto: lo está imitando.

Por desgracia, resulta muy complicado saber interpretarla ya que carece de contenido semántico. Es como un “lenguaje escondido”. Esta jerga se produce de manera repetitiva y como un comportamiento auto-estimulatorio. En ocasiones, intercala alguna palabra o frases con sentido, pero fuera de contexto.

Los niños pueden pasarse hablando en su “idioma” pero sin dirigirse al otro. ¿Por qué lo hacen? Porque están intentando expresar algo. Normalmente el niño está intentando decir una frase que él no puede construir, por lo que “rellenan” la oración con palabras sin sentido (los adultos hacemos lo mismo cuando cantamos una canción, pero olvidamos la letra y nos “inventamos” las palabras).

Pero, ¿es lo mismo el balbuceo que la jerga? En los bebés, estos balbuceos suelen representar los precursores al habla. Se puede decir que esta “jerga” propia de los más pequeños, forma parte de su evolución y desarrollo lingüístico. Cuando este balbuceo en los niños no desaparece con el tiempo para dar lugar a nuevas palabras y frases, se convierte en una jerga.

  • Su manera de “hablar” es esa porque no tienen el nivel expresivo que implica para elaborar una frase correspondiente al contexto;
  • Si bien es difícil poder entender qué es lo que nos está tratando de decir, resulta conmovedor que un niño con poca o escasa intención comunicativa, se dirija a nosotros y nos intente llamar la atención con su jerga tratando de respondernos, ¿no creéis? También suele pasar que deciden en qué momento desconectarse del mundo y aparece la jerga del autismo, por ejemplo, cuando no quieren realizar determinadas tareas o no quieren atender al adulto;

Es una manera de auto-regulararse: no me interesa, entonces desconecto y me meto en mi mundo con mis conversaciones. ¿Cómo reducir la jerga del autismo? Por desgracia, no hay una receta milagrosa para ello. Tenemos que estar muy atentos a las emisiones del niño.

Cuando empieza a mezclar palabras o frases con jerga, es un buen indicio ya que eso significa que el lenguaje está emergiendo y es ahí cuando debemos de aprovechar para reforzar ese lenguaje funcional y que sus peticiones se hagan fuertes y sólidas.

Debemos de enseñarle a imitar frases para reducir la cantidad de jerga emitida, de manera que vaya generando un lenguaje con sentido y adecuado al contexto comunicativo. La figura de un logopeda es importante en estos casos, el cuál os orientará y os ayudará a crear oportunidades que hagan emerger el lenguaje a través de juegos y rutinas diarias.

¿Cómo evitar los gritos de un niño autista?

Estrategias para tranquilizarlos – La mejor estrategia es la prevención. Es decir, evitar las situaciones estresantes que puedan desembocar en un meltdown o un ataque de gritos. Las estrategias más efectivas para tranquilizar al niño y prevenir ataques son:

  • Anticipar los meltdowns. Los niños autistas muestran síntomas previos al meltdown como la repetición de preguntas, moviéndose como si se mecieran o manteniéndose inusualmente callados por mucho tiempo. Lo mejor es tratar de distraer al niño y calmarlo para evitar el meltdown antes de que comience.
  • Identificar las causas. Todos los niños son diferentes y los factores que los aquejan no son los mismos. Es importante comunicarse con él así como observar qué situaciones o estímulos le dificultan.
  • Minimizar los estresantes. Una vez que tengas claro qué es lo que estresa al niño, debes hacer todo lo posible para minimizar el daño a través de diferentes técnicas como ayudas sensoriales (lentes de sol, auriculares etc. ) y una rutina clara.
  • Crear un ambiente de bajos estímulos. Tener un espacio donde poder apagar las luces y estar en silencio puede ser de gran ayuda para calmar a un niño autista. Otros métodos para reducir los estímulos pueden ser: lentes de sol, auriculares con cancelación de ruido o una manta ponderada.
  • Rutina. Mantener al niño en una rutina clara la cual conozca y entienda es la mejor forma de prevenir estrés. Si va a haber un cambio en la rutina posibles estrategias pueden ser: generarlo de forma gradual, reforzar aspectos de la rutina que no vayan a cambiar y crear métodos para que el niño pueda expresar su frustración de forma controlada como golpeando una almohada o rompiendo papel.
  • Técnicas para reducir la ansiedad. Estas técnicas varían dependiendo de las necesidades del niño pero existen muchas formas de lidiar con la ansiedad en el caso del autismo. Estas pueden apuntar a calmar al niño como por ejemplo escuchar música relajante, salir en una caminata, usar amansa loco o técnicas que apunten a quemar energía como saltar en un trampolín, correr, etc.
  • Entiende la forma en la que el niño se comunica. Algunos niños autistas no se comunican de la misma forma que otros niños neurotípicos por lo que es importante aprender a interpretarlos para entender sus preocupaciones así como sus necesidades.

¿Cuánto dura una crisis de autismo?

Usualmente si no son graves esto no dura mas de una semana, sin embargo, si son graves, con sintomas disociativos, agresividad, aislamiento total, cambios drásticos del comportamiento pueden durar mas y se debe buscar ayuda de un profesional de la salud.

¿Cómo son los berrinches de un niño autista?

Como Ayudar A Un Niño Con Autismo En La Escuela Rv. La rabieta y el llanto son conductas frecuentemente empleadas por los niños y las niñas con trastornos del espectro autista de nivel 1, o con síndrome de Asperger, para actuar sobre su entorno, tanto para conseguir un objetivo material como para finalizar una actividad que no sea de su agrado. Existen berrinches y existen crisis y es muy importante diferenciar una cosa de la otra porque las provocan diferentes causantes y se deben atender de diferente forma:

  • Los berrinches son intencionales, el niño tiene el control y utiliza el berrinche como recurso para manipular al adulto y lograr un objetivo, sabe exactamente cuando detenerse por que lo ha logrado o por que ha fracasado en su intento.
  • Una crisis de un menor con autismo no es intencional, el niño o niña pierde el control.

Normalmente la crisis la provoca una sobrecarga sensorial (mucho ruido, demasiadas luces o colores, olores o sabores intensos, texturas en la ropa o materiales con los que está trabajando), cambios repentinos en la rutina o el entorno, frustración, estrés, ansiedad, miedo excesivo, incertidumbre… o varios factores al mismo tiempo. Pueden desarrollarse estrategias para reducir la tensión que experimentan en determinadas situaciones las personas con Asperger o autismo. Por ejemplo, las advertencias de que una actividad debe terminar en «X» minutos puede ayudar con los mayores. A medida que los niños crecen algunos problemas se resolverán con más facilidad pero al igual que con el resto de los niños los problemas existirán.

Todos los niños y niñas tienen alguna vez un berrinche pero en aquellos que tienen síndrome de Asperger son peculiares y especialmente críticos. En un berrinche el adulto está pasando un mal rato y en una crisis el niño es el que pasa un mal rato.

Algunos adolescentes pueden sentir la carencia de amistades como algo difícil de afrontar, ya que intentan, con esfuerzo y a su modo hacer amigos, pero encuentran dificultad para conservarlos. Como Ayudar A Un Niño Con Autismo En La Escuela Éste no es siempre el caso, muchos tienen amigos que actúan como «compinches» por largos períodos de tiempo. Sería de gran importancia crear métodos para evaluar los procesos reguladores. Podemos alimentar la autorregulación mediante enseñar a hacer elecciones (p. elegir entre dos deseos). También es importante tener en cuenta las claves del contexto relativas a las posibilidades de una acción.

Así, podemos enseñar a inhibir algunas acciones dependiendo de las claves del contexto (p. enseñar una clave para informar que algo, en ese momento, no es apropiado hacerlo). Otro modo de desarrollar la autorregulación es enseñar habilidades de relajación.

«Podemos llevar a cabo una desensibilización sistemática a estímulos nuevos o a cambios en el entorno utilizando la relajación. Podemos utilizar un monitor de ritmo cardíaco para conocer el nivel de relajación y mejorarlo. » (Javier Tamarit). _________.

¿Qué color prefieren los autistas?

Consejos para el manejo de niños con autismo en el aula | Dr. Roberto Rosler

El color azul es el color que representa al mar. A veces, el mar está tranquilo y en otras oportunidades está revuelto. Lo mismo sucede en las vidas de una persona con autismo y su entorno familiar: Hay días serenos y otros más tormentosos. Es por eso que el color azul se transformó en símbolo de los Trastornos del Espectro Autista (TEA).

  • Los TEA son un grupo de trastornos que afectan la comunicación e interacción social de quienes los padecen;
  • También traen consecuencias en la conducta y el procesamiento sensorial; en algunos casos, esta falta de habilidad para comunicarse va acompañada de un retraso intelectual;

Gracias a un mayor conocimiento, hoy se puede detectar esta condición en edades tempranas. Algunas señales de alerta son:

  • No responde cuando lo llaman por su nombre
  • No realiza o evita el contacto visual
  • Tiene un retraso en el habla y el lenguaje
  • Se irrita cuando se altera mínimamente una rutina
  • No demuestra afecto o sentimientos hacia las personas más cercanas
  • Mueve descontroladamente alguna parte del cuerpo (usualmente, las manos).

La intervención y estimulación temprana mejora el pronóstico de los niños que muestran alteraciones en su desarrollo. Si un niño no desarrolla alguna habilidad acorde a su edad -o si la pierde en el transcurso de su maduracion- se debe consultar con un especialista. Sobre el Día Mundial de Concientización En el año 2007, la Asamblea General de las Naciones Unidas designó el 2 de abril como el Día Mundial de Concientización sobre el Autismo.

  • Desde entonces, cada 2 de abril se realizan actividades de concientización en todo el mundo, con el objetivo de difundir información actualizada sobre los TEA y la importancia de un diagnóstico temprano para mejorar la calidad de vida de las personas que la padecen;

Este año, debido al aislamiento obligatorio por la pandemia mundial de Coronavirus, se realizarán eventos virtuales a través de redes sociales y otras plataformas. Bajo el lema “Puedo aprender. Puedo trabajar. ”   y el hashtag #CuarenteAzul , se darán a conocer los derechos de las personas con TEA y sus familias, como el acceso a una educación y a un empleo de calidad que se adecue a las capacidades, prioridades y necesidades específicas de cada uno Fuente: http://redea.

¿Que no hace un niño con autismo?

Diferencias sociales de los niños con autismo: –

  • No mantiene contacto visual o establece muy poco contacto visual.
  • No responde a la sonrisa ni a otras expresiones faciales de los padres.
  • No mira los objetos ni los eventos que están mirando o señalando los padres.
  • No señala objetos ni eventos para lograr que los padres los miren.
  • No lleva objetos de interés personal para mostrárselos a los padres.
  • No suele tener expresiones faciales adecuadas.
  • Es incapaz de percibir lo que otros podrían estar pensando o sintiendo al observar sus expresiones faciales.
  • No demuestra preocupación (empatía) por los demás.
  • Es incapaz de hacer amigos o no le interesa hacerlo.

¿Que le hace la luz a los autistas?

Los chicos con autismo son especialmente susceptibles a cambios de humor debido a la iluminación. Las luces con colores tranquilos, como el azul, pueden ayudar a tranquilizar al niño y estimular su creatividad. Las luces intermitentes con fuertes colores, por otro lado, pueden confundir e inclusive dañarlos.

¿Cómo hacer juegos para niños autistas?

¿Qué es lo que les gusta a los niños con autismo?

    • Deja que el niño esté a cargo. Haga que él / ella elija la actividad en lugar de presentarle una nueva.
    • Si tu hijo necesita ayuda para usar un juguete, no temas mostrarle cómo usarlo. Pero no tomes el control total, deja que lo pruebe por sí mismo después de que le muestres cómo usarlo.
    • Sé consciente de las necesidades sensoriales de tu hijo o del niño con autismo antes de acercarte demasiado durante el juego. El niño te hará saber cuánto guía y espacio necesita.

Las opiniones de cómo criar a los hijos son infinitas por estos días ¿verdad? Si bien es posible que no todos estemos de acuerdo con el tipo de juego, ya sea que se trate de ideas de “vieja escuela”, como parques y playgrounds, o nuevos tipos de juegos basados en tecnología, como tabletas y videojuegos, la idea de que los niños deberían jugar es un concepto ampliamente aceptado en nuestra sociedad. Pero, ¿qué pasa si tu hijo no puede jugar o no juega como lo hacen otros niños? Claro, el valor del juego suena maravillosa si tu hijo tiene las habilidades para socializar y participar, hacer amigos y comunicarse. ¿Pero qué pasa si tu hijo es diferente? ¿Qué pasa si tiene autismo? Muchos niños con autismo encuentran que el mundo es un lugar amenazante y abrumador y, en consecuencia, pueden desarrollar habilidades para ayudarlos a desentenderse de la sobreestimulación de nuestro medio ambiente.

La idea de que los niños deben estar jugando es contraintuitiva a una característica central de los niños con autismo: la separación. Entonces, ¿cómo haces que un niño quiera participar en el juego cuando su fijación primaria es desentenderse, separarse? “Muchos niños con autismo encuentran que el mundo es un lugar amenazante y abrumador y, en consecuencia, pueden desarrollar habilidades para ayudarlos a desentenderse de la sobreestimulación de nuestro medio ambiente.

” Autismo se ha convertido últimamente en una palabra de moda en los medios de comunicación convencionales y en nuestras comunidades. Si no conoces a un niño con autismo, lo más probable es que lo hagas más pronto de lo que te imaginas. Tal vez tu vecino tiene un hijo con autismo, o tiene un miembro de la familia con autismo.

Puede ser difícil saber cómo involucrarse con un niño que experimenta dificultad significativa para interactuar, socializar y comunicarse. ¿Cómo podemos ayudar a esos niños a usar el juego como medio para acceder al mundo de una manera positiva y significativa, que estimule su cerebro, refine sus habilidades motoras y construya relaciones sociales? Todas esas habilidades puede atribuirseles al juego.

Las habilidades del juego pueden haberle llegado fácilmente a tu hijo, pero para un niño con autismo  es otra historia. Los chicos con autismo pueden requerir la intervención de un adulto o la habilidad de un profesional para ayudarlos a adaptarse al mundo de una manera lúdica y social. Cinco consejos para ayudarte a integrar de una manera significativa con un niño con autismo:

  1. Acércate con respeto y amabilidad : aunque no es necesario ser tímido, los niños con autismo pueden requerir una mayor cantidad de espacio personal. Encuentra la proximidad física con la que tú y el niño se sientan cómodos, y comprende que esto puede cambiar de un día para el otro. Puede haber momentos en los que el niño esté buscando estimulación y desee abrazos y sentarse muy cerca tuyo, mientras que en otras ocasiones el niño puede estar evitando la estimulación y puede necesitar más distancia.

    Como terapeuta ocupacional que trabaja con niños con autismo, la facilitación de habilidades de juego es una parte grande y gratificante de mi papel. Pero tú no necesitas ser un profesional para jugar con un niño con autismo.

    La cercanía y el contacto pueden ser amenazantes. Tómate un minuto para interpretar las necesidades sensoriales del niño antes de invadir su espacio. El niño a menudo te dará pistas, así que sé paciente y experimenta con las distancias y espacios.

  2. Entra a su mundo en vez de querer presentarle un nuevo juego o juguete: jugar con el niño e interactuar con su actividad preferida puede resultar más cómodo para él. Observa lo que el niño te señale. Los niños con autismo pueden o no usar el lenguaje para hablar, pero eso no significa que no sean capaces de comunicarse, así que ponle atención  a su gestos, sus  signos, su lenguaje corporal y las expresiones faciales.
  3. Entiende que hay un valor en el juego paralelo: jugar junto a un niño que parece ignorarte es tremendamente significativo para el niño. No te rindas fácilmente si el niño no te presta atención. Los niños con autismo pueden tener dificultad para dividir su atención, pero su presencia se siente todavía y si eres paciente, valiosas habilidades de juego se pueden intercambiar y demostrar durante estas interacciones.
  4. Enseñale y demuestrale cómo divertirse: los chicos con autismo pueden requerir una demostración de cómo jugar con un juguete. Las habilidades de juego pueden no ser naturales para niños con autismo, y por eso ellos pueden beneficiarse de un compañero o un adulto que los ayude a jugar con un juguete u objeto. No asumas que simplemente no quieren jugar con el juguete. Puede que no sepan cómo jugar.

    Los niños que no son verbales son capaces de entender el lenguaje y son a menudo brillantes y creativos. Si el niño tiene un estrecho repertorio de habilidades de juego, trata de facilitar más participación ampliando las habilidades de juego que ya tienen.

    Los niños con autismo tienden aprender ‘visualmente’, así que haz más demostraciones y menos charla.

  5. Cambios y transiciones pueden ser difíciles: el cambio puede ser difícil para los chicos con autismo. Expande las habilidades de juego lentamente y en sus términos. Genera confianza para reducir la ansiedad. Los niños con autismo son como otros niños. A ellos les gusta divertirse y hacer cosas que los haga sentir bien, pero pueden necesitar más repeticiones o demostraciones de cómo participar con un juguete u objeto.

    Además, al igual que cualquier otro niño, pueden encontrar formas alternativas de jugar con un juguete. Alienta sus propios métodos creativos y respeta la individualidad. Por último, dado que el cambio puede ser difícil, puedes  jugar con un juguete durante un largo período de tiempo.

    No te  apresure a cambiar las actividades. Deja que el niño juegue con lo mismo durante más tiempo, si aún no está listo para seguir adelante.

No tengas miedo de hacer algo mal. Estos consejos son útiles: mantén una mente abierta y un espíritu lúdico y podrás tener una experiencia de juego significativa, y si tienes suerte,  hasta puedes echar un vistazo al mundo del niño..

¿Cómo enseñar a leer y escribir a un niño con autismo?