Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela?

Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela

Baja valoración de la educación, y por tanto transmisión de analfabetismo intergeneracional. Baja autoestima, que puede llevar al aislamiento. Una mayor propensión a accidentes en el trabajo y desconocimiento del nivel de salud y los recursos para mejorarlo.

¿Qué pasa si un niño no asiste a la escuela?

Consecuencias de faltar a clases – ¿Qué pasa si un niño falta mucho al colegio? Cuando las faltas a clase son demasiado elevadas y el absentismo es más que frecuente suelen producirse consecuencias muy graves , como:

  • Descenso del rendimiento académico, y malas notas.
  • Hábitos poco saludables. Cuando los adolescentes faltan a clase, dedican su tiempo a otras actividades que normalmente son poco saludables: consumo de sustancias nocivas, malas compañías, etc.
  • Escaso o nulo desarrollo de la autonomía y responsabilidad.
  • Consecuencias demoledoras en su futuro laboral e incluso personal.

¿Qué pasaría si no fuéramos a la escuela?

¿Cómo sería el mundo sin escuela? – Hoy en día es impensable que exista un mundo sin sistema educativo pero, ¿qué pasaría si fuese así? Sin ese sistema educativo, nunca se hubiesen producido los avances de la ciencia y la tecnología. … El desarrollo depende de que las nuevas generaciones gocen de una educación en igualdad de oportunidades.

¿Qué pasa si no mando a mi hijo al colegio 2022?

Desde principios de marzo de 2020 la realidad de la educación cambió, los profesores, apoderados y alumnos se debieron adaptar a las clases online, en un inicio y luego, desde este año, a la llamada modalidad híbrida. Todo en un contexto en el cual los estudiantes asistían a estas clases en línea, o voluntariamente de manera presencial, entendiendo que no todos los alumnos tenían las condiciones para conectarse eficientemente a través de Internet, sobre todo en las zonas rurales.

Pero la campaña de vacunación, que mantiene a la población desde los tres años con menos riesgo de enfermar gravemente con el virus, estableció un nuevo panorama, por lo cual desde el próximo año volverán las exigencias prepandémicas en materia educativa.

Anuncio que el ministro de educación, Raúl Figueroa, hizo a mediados de noviembre. Esto quiere decir que la asistencia a clases dejará de ser voluntaria y tampoco se continuará con las modalidades online o mixta, por lo que los alumnos que no lleguen a las aulas el próximo año podrían incluso repetir de curso si no cumplen con un mínimo de asistencia, a no ser que esta esté bien justificada.

  1. Así lo recordó Claudio Oyarzún, seremi de Educación, quien aclaró que “la regla dice que se requiere de un 85% de asistencia, esa es la regla de un año normal que, por razones obvias, no se ha aplicado durante los últimos dos años, sin embargo, si un alumno acredita fundadamente cuál fue la causa que lo llevó a una inasistencia mayor, por supuesto que no incurre en una causal de repitencia;

Pero distinto es un alumno que no teniendo esa condición deje de ir a clases”. La vuelta a las aulas es importante para el proceso educativo indicó Oyarzún, “en unos años tan complejos de pandemia, retomar la presencialidad es clave para que los procesos continuos de aprendizaje no se vean afectados y no asistir a clases obstaculizará la recuperación de los contenidos”.

Pero, aparte de la repitencia para los alumnos ¿los padres se exponen a algún tipo de castigo si deciden no enviar a sus hijos a clases? De acuerdo a la ley 20. 370 “la educación es un derecho de todas las personas.

Corresponde preferentemente a los padres el derecho y el deber de educar a sus hijos; al Estado, el deber de otorgar especial protección al ejercicio de este derecho y, en general, a la comunidad, el deber de contribuir al desarrollo y perfeccionamiento de la educación”.

La misma norma establece también que “la educación básica y la educación media son obligatorias, debiendo el Estado financiar un sistema gratuito destinado a asegurar el acceso a ellas de toda la población, así como generar las condiciones para la permanencia en el mismo de conformidad a la ley”.

Julián González Mallea, director regional de la Superintendencia de Educación de Coquimbo, sostuvo que “la Superintendencia de Educación no tiene facultades para sancionar a los padres o apoderados que no quieran enviar a sus hijos o pupilos al colegio.

  • Sin embargo, los mismos establecimientos pueden solicitar medidas de protección a las Oficinas de Protección de Derechos (OPD) y ante los Tribunales de Familia por no resguardar el derecho a la educación de esos niños y niñas;

Asimismo, los estudiantes que no concurran a clases arriesgan repetir el año por inasistencia”. González Mallea reiteró que “con el avance del proceso de vacunación, implementado por el Minsal, de los funcionarios del sector de educación y de los niños y niñas, junto a la correcta aplicación de los protocolos de higiene, los establecimientos educacionales son lugares seguros, que resguardan la salud de toda la comunidad educativa frente a la pandemia por Covid-19”.

¿Qué pasa si no quiero mandar a mi hijo a clases presenciales?

Cuando el alumno regrese a clases presenciales se les realizará una valoración diagnostica para conocer cuál es su nivel de aprovechamiento escolar. El 30 de agosto inició el ciclo escolar 2021-2022 , de acuerdo al calendario de la Secretaría de Educación Pública (SEP), por ello se publicó en el Diario Oficial de la Federación ( DOF ) un acuerdo para los tutores, madres y padres de familia que han decidido no enviar a sus hijos a clases presenciales.

Tanto la SEP, como su titular Delfina Gómez y el presidente Andrés Manuel López Obrador han reiterado en diversas ocasiones que el regreso es voluntario y en caso de que los padres o madres de familia no envíen a su hijo a clases presenciales deberán seguir pendientes del programa Aprende en Casa.

Además, los padres o tutores deberán realizar la inscripción o reinscripción en el nivel y grado educativo correspondiente, que estará disponible hasta el 10 de septiembre. La medida es para formalizar los procesos y que los niños sean registrados en la matrícula del Sistema Educativo Nacional.

  • Cuando el alumno regrese a clases presenciales se les realizará una valoración diagnostica para conocer cuál es su nivel de aprovechamiento escolar;
  • Las autoridades e instituciones darán seguimiento a los alumnos que optaron por continúan tomando clases desde casa, priorizando a aquellos que se ubican en zonas de alta y muy alta marginación;

Se establecerá un plan de trabajo individualizado que incluye el otorgamiento de materiales, orientaciones, ejercicios, actividades y todo aquello que pueda incentivar a los alumnos en su progreso.

¿Por qué hay que ir a la escuela?

Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela (Maximiliano Luna) En estos días, de tantas incertidumbres y vacilaciones, sólo hay una certeza: la escuela debe permanecer abierta. Si hacemos un rastreo histórico, podemos fundamentar la importancia de la institución escolar en un país que fue configurándose a expensas de ella. Su mandato fundacional fue igualar a una población que comenzaba a sumar millones de ciudadanos, allá a fines del siglo XIX.

  • De 3;
  • 005;
  • 000 habitantes que tenía la Argentina en 1885, creció a 7;
  • 885;
  • 000 de ciudadanos en 1914;
  • Dato no menor es que, en ese entonces, los analfabetos llegaban al 35% y la cuarta parte de la población era extranjera;

Estas estadísticas sirven para entender que la Ley 1420 (1884) fue una herramienta de homogeneización en una sociedad tan dispar. La corriente normalizadora hizo el resto para que niñas y niños accedieran a un derecho fundamental, la educación; transformándose en un instrumento de democratización, de transformación social y de desarrollo económico.

Y nadie pone en dudas que el siglo XX estuvo marcado por una impronta que se plasmó muy bien en la obra del uruguayo Florencio Sánchez, M´hijo, el dotor , donde la educación fue percibida como la posibilidad de crecimiento social.

Nuestros padres, nuestros abuelos, los que pudieron hacerlo, terminaban la primaria o, mucho mejor, la secundaria, y conseguían un trabajo que les permitía vivir dignamente. Mucho más aún si accedían a la universidad, la inserción y el prestigio social estaban garantizados.

Ahora bien, desde hace un año estamos inmersos en una cuarentena “perpetua”, producto de una pandemia mundial que nos cayó como un baldazo de agua fría y nos dejó a la intemperie. La escuela estuvo suspendida durante el 2020 y cuando todos pensábamos, vacunas mediante, que mejoraría, pareciera que todo vuelve a empezar.

No caben dudas que la salud es lo primordial en un país que lucha contra la pobreza estructural desde hace años, donde los más vulnerados no tienen las necesidades mínimas satisfechas y su contexto los lleva a enfermedades propias de su entorno y, asimismo, a dificultades para acceder a la salud pública.

No obstante, son esos mismos ciudadanos y ciudadanas quienes se ven perjudicados si la escuela está cerrada. El año pasado algunos creyeron que la educación virtual había reemplazado a la educación presencial; sin embargo casi el 50% de los estudiantes no accedían a dispositivos tecnológicos y, quienes los tenían, no encontraron en casa quienes supieran o pudieran ayudarlos con la tarea.

En otros casos, las y los docentes dejaron el material en el kiosco de la esquina para que algún familiar les sacara fotocopias o daban clases por la radio barrial. En Rosario, el caso de la maestra que llegó en canoa para dejar actividades a sus alumnos y alumnas, fue emblemático.

A la escuela no sólo se va a aprender contenidos académicos; es decir, saberes propios de una disciplina, conceptos o datos. También se va a aprender a estar con otros; allí se enseñan habilidades sociales y emocionales que nos permiten aprender a convivir, una palabra tan usada, pero carente de sentido, a veces.

Con estos aprendizajes nos constituimos sujetos sociales, nos apropiamos de conocimientos, habilidades y destrezas que nos habilitan a movernos en el mundo. Y si bien las críticas que se le hace a la institución son acertadas: la rigidez horaria, los espacios prefijados y la obligación de permanecer sentados mirando la nuca del compañero, cambiando cada 40 minutos de profesor; es necesario buscar alternativas para los estudiantes de hoy, quienes cada vez más se desgranan del sistema.

Además, hoy por hoy, a diferencia de hace cuarenta o cien años atrás, no sólo es menos atractiva, sino que no garantiza la movilidad social que implicaba hasta hace un tiempo. Sin embargo, su función es fundamental.

Y es allí donde el Estado debe estar presente con programas focalizados según los barrios o las zonas más necesitadas. Por ende, la escuela no puede cerrar, es la llave de acceso que tienen las infancias a un mundo complejo y hostil, pero que les dará herramientas para habitarlo más amorosamente.

El sistema educativo argentino cuenta con 14 millones de niños, niñas y jóvenes que no pueden desgranarse o perderse por el camino. Hoy hay que pensar nuevas alternativas para traerlos y atraerlos nuevamente.

Los adolescentes que no asisten a la escuela, estarán en la esquina, con lo que ello conlleva, y esas situaciones nos llevarán mucho tiempo revertirlas; nos costará mucho volver a darles aprendizajes, vivencias y oportunidades. Necesitamos un debate sincero y concienzudo acerca de la escuela como mediadora para la integración social, que ayude a reflexionar acerca de las diferencias que conforman nuestra sociedad, diferencias no sólo económicas, sino culturales y educacionales.

  • Y, a partir de allí, conformar un sistema educativo que respete las trayectorias individuales y que incluya las problemáticas propias de las juventudes;
  • Los adultos, padres, docentes y directivos debemos acompañar de la mejor manera, comprometernos a cumplir con las nuevas normas que evitan contagios; pero, fundamentalmente, instar por la salud física y psicológica de niñas, niños y jóvenes; esto es, exigir que estén con sus compañeros en la escuela;

Hacer tareas y actividades en casa es hacer como si… En estos días tan complejos, la mediación entre el sistema educativo y la familia es fundamental. Por lo tanto no dejemos los espacios educativos librados al azar. Todos ellos son parte de la formación integral de los niños y niñas.

Hannah Arendt plantea que la escuela “no es el mundo, pero ante los ojos de los niños lo representa” y es allí donde nos constituimos sujetos de una sociedad. Ese es el carácter intermediario de esta institución; por ello, las infancias en la escuela.

Es necesario considerar el espacio educativo como esencial y darles la posibilidad de la toma de decisiones responsables y con la presencia de un Estado apoyando dichas decisiones. Toda la sociedad debe comprometerse con la educación, que no depende solamente del presupuesto que un gobierno le destine.

Somos los adultos quienes debemos defender las instituciones como garantía de lazo social, requisito para la construcción, la deconstrucción y/ o la reconstrucción de cada una de ellas y con el compromiso de menos ignorancia, menos miseria y más educación que no es poco.

SEGUIR LEYENDO:.

¿Por qué tenemos que ir a la escuela?

INTRODUCCIÓN La escuela compone el eje y núcleo central y primordial de la educación; tanto en la comunidad como en la familia, por tanto, su papel como institución está enmarcado en dos direcciones una formar y la otra preparar, para lograr la formación integral del hombre para la sociedad en la cual se va a desenvolver.

Para Echavarría (2003 ), constituir la escuela como escenario de formación y socialización connota dos tipos de reflexiones: la primera refiera la configuración de los elementos pedagógicos, metodológicos y estructurales propicios para la orientación de los procesos de enseñanza y aprendizaje; y la segunda se connota en la estructuración de la escuela como escenario de formación y socialización.

Partiendo de lo anterior, la escuela es el lugar donde el estudiante va a retener, comprender y hacer uso activo del conocimiento trasmitido, por lo que las prácticas educativas deben estar encaminadas a la reflexión y participación activa con el fin de desarrollar la mente en los diferentes ámbitos del individuo, esto permite tener mayor comprensión no solo de los temas académicos que se presentan, sino también de las enseñanzas que la vida le brinda a cada uno, donde el individuo podrá expresar sus ideales, habilidades, aptitudes, que darán espacio a la interacción, construcción y desarrollo de sus potencialidades.

El presente trabajo aborda la importancia de la escuela, el profesor y el trabajo educativo en función de lograr la disminución de la deserción escolar en el contexto educativo colombiano, teniendo como objetivo reflexionar sobre la significación de la escuela y el profesor como agencia y agente educativo, respectivamente y el papel que deben jugar en la disminución de la deserción escolar.

DESARROLLO “La escuela, como ente educativo, desempeña un papel prioritario en la formación de las personas, puesto que ella, como institución social, debe responder a la necesidad de formar a las nuevas generaciones según los intereses que el Estado conciba en la dinámica de sus relaciones económicas, sociales, políticas y culturales, tanto nacionales como internacionales.

You might be interested:  Como Poner Una Escuela De Manejo?

Así, la escuela fue creada por la sociedad y a ella se debe, por tanto, su misión es formar hombres para que, mediante el trabajo, satisfagan las necesidades que de ella brotan. Su esencia es, entonces, resolver los problemas que emanan de las necesidades sociales” (Álvarez, 1996: 248).

La institución educativa proporciona espacio de formación individual y colectiva, en el cual se realiza un proceso de identidad según la sociedad y actividades de socialización con los pares, por lo que se debe considerar como un espacio de trasmisión, no solo de conocimientos académicos sino de múltiples culturas, prácticas y expresiones sociales.

Es innegable que en todo proceso educativo, del nivel básico hasta la educación superior, el trabajo en equipo juega un papel determinante en la formación de los alumnos; y que la labor de los profesores requiere cada vez más del trabajo cooperativo, por lo que es de importancia vital el colegiar todas y cada una de las actividades que el personal desarrolla.

Para Álvarez “[. ] la relación entre maestros y estudiantes es algo más complejo que el proceso de enseñanza aprendizaje y está integrada por la relación sistémica existente entre siete componentes:

  • Primero, el problema, la situación de un objeto que genera una necesidad en un sujeto que desarrolla un proceso para su transformación.
  • Segundo, el objetivo, el propósito, la aspiración que el sujeto se propone alcanzar en el objeto para que, una vez transformado, satisfaga su necesidad y resuelva el problema.
  • Tercero, el contenido, los diferentes objetos de las ciencias que ha construido la cultura.
  • Cuarto, el método, la organización interna del proceso docente-educativo en tanto procesos de comunicación y acción; son los pasos desarrollados por el sujeto en su interacción con el objeto, a lo largo del proceso docente-educativo.
  • Quinto los medios, herramientas que se utilizan para la transformación del objeto.
  • Sexto, la forma, organización adoptada desde el punto de vista temporal y organizacional en la relación docente-discente para desarrollar el proceso docente-educativo.
  • Séptimo, la evaluación, constatación periódica del desarrollo del proceso, de modificación del objeto” (Álvarez, 1996: 247-248).

Esta relación forma un sistema de interacción entre maestro y estudiante, que no solo se desarrolla a nivel académico, sino también personal, lo que contribuye a que los estudiantes generen confianza hacia su docente y puedan desarrollar habilidades sociales que permiten una mejor comunicación y comprensión, en esta relación el objetivo es que el maestro acompañe al estudiante y le de herramientas para afrontar situaciones, además de revelar la importancia de la educación y de un proyecto de vida que defina y aclare las aspiraciones del individuo. Es así como la escuela y los maestros se convierten en un elemento fundamental en el desarrollo del estudiante, no solo a nivel académico sino personal, pues brindan herramientas para afrontar situaciones de la vida, de esta forma, ante la deserción escolar, las instituciones deben generar nuevas prácticas educativas que atraigan a los estudiantes y les brinden confianza y estabilidad, lo cual puede estimular deseos de permanecer en la escuela y buscar alternativas para no desertar de esta. Las instituciones educativas deben diseñar estrategias que mitiguen la deserción en los estudiantes, por lo que el Ministerio de Educación Nacional expone las siguientes estrategias:

  • La primera se enfoca a integrar “instituciones educativas” que estén en capacidad de ofrecer todo el ciclo básico. […] Si una sola institución se encarga de asegurar el ciclo educativo desde el grado 0 al grado undécimo, reduciremos los problemas de obtención de cupos y abriremos mayores espacios en torno a la consistencia de los programas de calidad educativa.
  • La segunda estrategia está asociada al diseño de los planes de mejoramiento y al fortalecimiento de las instituciones educativas en los frentes de gestión de recursos y de tipo pedagógico, para lograr que los estudiantes alcancen mayores niveles de logro. A partir de los resultados de las evaluaciones, todas las instituciones educativas deberán proponer y formular planes de mejoramiento, lo que les permitirá definir nuevas metas, corregir sus deficiencias, reforzar sus fortalezas, mejorar sus estrategias pedagógicas y aumentar las tasas de promoción con buenos niveles de calidad.
  • La tercera tiene que ver con la pertinencia. Tenemos que motivar a los niños por el acceso al conocimiento, por el desarrollo de la capacidad crítica y el pensamiento propio alrededor de sus propias realidades y de sus proyectos de vida, y generar vínculos constructivos con su institución, sus maestros y sus comunidades.
  • La cuarta tiene que ver con la flexibilidad de los modelos educativos que se implementan, que deben ser capaces de adaptarse a las necesidades de los niños y a las especificidades de cada región del país. (Ministerio de Educación Nacional, 2003).

Estas estrategias no solo se deben implementar en la zona urbana sino también en la rural, pues allí no se cuentan con programas que permitan relacionar la familia, escuela y comunidad, por lo que es necesario buscar alternativas en los modelos educativos, es decir, modificar la pedagogía donde sea posible introducir pequeños grupos trabajando con estrategias de educación personalizadas y colaborativas, buenos materiales educativos que permitan el avance gradual de los alumnos, así como lazos estrechos con la comunidad a través de proyectos de desarrollo local (Ministerio de Educación Nacional, 2001) De esta forma los profesores en compañía de la institución educativa, deben tener en cuenta las estrategias dadas por el Ministerio de Educación Nacional y crear un programa interdisciplinario que trabaje con la familia y la comunidad, implementando un modelo educativo acorde a las necesidades de los estudiantes, donde se apoye, se motive, se acompañe y se vigile el proceso de enseñanza-aprendizaje, garantizando una mejor calidad de vida para los estudiantes y la sociedad. Desde esta lógica de pensamiento, hay que destacar la importancia del trabajo educativo y sus potencialidades en la atención a la deserción escolar. Todo proceso pedagógico se desarrolla desde la interrelación armónica de lo instructivo, lo educativo y lo desarrollador.

  • La deserción escolar se da a partir del debilitamiento de estos tres componentes de la actividad pedagógica;
  • La debilidad en el conocimiento, en la instrucción, repercute en la educación del estudiante y lleva a manifestaciones de desinterés por el estudio, por la escuela y a la salida del sistema;

Para combatir la deserción escolar, hay que luchar contra las causas que la provocan y en esta tarea el trabajo en la dirección de la educación de los sentimientos y valores, juega un papel esencial. El trabajo educativo contribuye a la formación integral de las nuevas generaciones, fortaleciendo el sentido de pertenencia social, que le permite visualizar su compromiso con los sectores sociales más necesitados y vulnerables, siendo partícipes de los problemas que le permiten a los ciudadanos necesitados alcanzar su propio desarrollo, el de su comunidad y la nación.

Desde el trabajo educativo se busca que los estudiantes se formen a través de la prevención, atención y reducción de situaciones que afectan el desarrollo, fomentando la participación en el área educativa y social que genera mejoramiento emocional e intelectual, mejorando las condiciones de vida de los estudiantes, lo cual se puede implementar en las diversas instituciones educativas que buscan disminuir los índices de deserción escolar.

Martínez, propone desarrollar las siguientes actividades educativas: “(1) la adopción de centros preescolares o escuelas primarias para dotarlas de mobiliario, aulas, material didáctico, muros perimetrales, etc. (2) Reforestación en calles, parques, ríos, etc.

(3) Alfabetización de jóvenes y adultos. (4) Acompañamiento a organizaciones comunales en sus proyectos. (4) Actividades de mejoramiento del medio ambiente. (5) Voluntariado en organismos de beneficencia. (6) Participación en campañas de salubridad” (Martínez, 2016).

El trabajo educativo en Colombia, podría mejorar los indicies de la educación en la zona urbana y rural, mediante la creación de programas educativos que se encarguen de enseñar a la población que ha desertado, en donde la pedagogía debe cambiar a una forma más dinámica, lo que atraerá ciudadanos con ganas de superarse y mejorar las condiciones de vida de sí mismos y sus familiares.

  • Al generar actividades que incluyan a las poblaciones vulnerables, se motivará a estudiar con herramientas que brinden alto rendimiento; las principales características que deben tener estos proyectos están en la comunicación, la confianza, la motivación, el apoyo, la comprensión, entre otras, que busquen aumentar la cobertura educativa en las distintas zonas del país, promoviendo cambios positivos en la educación y disminuyendo el porcentaje de desertores en el país;

Este proyecto educativo contribuye a aumentar los índices de educación del país, para lo cual se realizan campañas que abarcan desde la alfabetización, hasta la enseñanza de la educación básica, donde su mayor impacto se centra en las poblaciones vulnerables y de escasos recursos.

  • El trabajo educativo debe vincularse al Proyecto Educativo Institucional de las instituciones educativas, dándole oportunidades a los estudiantes de acceder a una educación distinta y pensada en sus necesidades, además se podrá vincula a actores como familia y la comunidad del que ha sido desertor e integrarlo de nuevo al proceso de formación educativa, para lo cual se debe trabajar en conjunto con el Estado, la sociedad, la escuela, la familia, para hacerlo productivo y de alto cubrimiento;

Es importante que se desarrolle el trabajo educativo, como parte importante del proceso de socialización y que en el participen todos los agentes y agencias socializadoras. La socialización es un proceso de interacción con distintos entornos, en el cual se aprende normas, actitudes, creencias, que enseñan a desempeñarse correctamente en ámbitos como; el familiar, el escolar, laboral y social.

  1. Flores manifiesta que la socialización es el “[;
  2. ] proceso de contacto e interacción que los niños deben realizar respecto de las demás personas;
  3. Esta es una construcción paulatina que permite la apropiación de las características observadas en el entorno” ( Flores, 2010 : 15);

Se asume la socialización como el proceso por el cual los individuos, en su interacción con otros, desarrollan las maneras de pensar, sentir y actuar que son esenciales para su participación eficaz en la sociedad. Por medio del mismo los seres humanos aprenden e interiorizan, en el trascurso de su vida, los elementos socioculturales de su medio ambiente, los integra a la estructura de su personalidad, bajo la influencia de experiencias y de agentes sociales significativos, y se adaptan al entorno social al que pertenecen.

“La formación del hombre es el objetivo de la educación, para lograrlo necesita trasmitir la cultura y regular el proceso de su asimilación por parte de cada sujeto social, propiciando su socialización.

En el proceso de socialización la educación juega un papel importante y junto a ella las agencias socializadoras: escuela, familia, comunidad, los medios de comunicación masiva, entre otros. En el marco de ese proceso se desarrolla la personalidad en todas sus potencialidades y elementos integrantes” ( Altavaz, 2012 : 27).

  1. Dentro del proceso de socialización se hacen presentes los agentes que permiten incorporar a los individuos a la sociedad, mediante espacios de reflexión, interacción, dinamismo, dialogo, entre otros, además son instancias para la trasmisión de conocimientos, normas y valores;

Entre las agencias de socialización se encuentran: la familia, los grupos de iguales, la escuela, los medios de comunicación masiva, la iglesia, entre otros, las cuales influyen de forma positiva o negativa en la deserción escolar; por ejemplo, la familia al presentar problemas económicos propicia que el estudiante deje de estudiar por falta de dinero o por la necesidad de trabajar para generar ingresos familiares, por otra parte, la separación de los padres, la violencia, el descuido, por parte de los padres o acudientes, el cambio de domicilio, entre otros factores, generan deserción en los estudiantes.

  • Las familias pueden tomar un papel de apoyo y comprensión hacia el estudiante, donde se preocupen por su desempeño académico y participen de las actividades de las instituciones educativas, con el fin de fortalecer las relaciones entre estudiante-escuela-familia, lo que ayuda a la disminución de este fenómeno;

En el caso de la escuela, esta agencia de socialización, cuando no juega el rol que le corresponde, presenta falencias en la metodología de aprendizaje, pues los estudiantes buscan una mayor comprensión de los temas que se tratan y cuando no se llega a esto, se generan problemas que llegan a verse en la repitencia de los grados, lo cual da paso al fracaso escolar, y esto funda pensamientos negativos en los estudiantes que les hacen optar por abandonar sus estudios, ya que se sienten frustrados y no cuentan con una motivación para seguir estudiando.

Por lo que, las instituciones educativas deben reestructurar la metodología de enseñanza y generar estrategias pedagógicas que ayuden a una socialización más activa dentro de las aulas de clase y fuera de las mismas, de esta forma los estudiantes se sentirán motivados a estudiar y continuar con los procesos educativos durante los años escolares.

Los grupos de iguales realizan exigencias hacia el cumplimiento de normas estipuladas dentro del grupo, allí el individuo busca ser aceptado y en ocasiones esto le puede traer enfrentamientos entre las normas que fueron interpuestas en la familia y la escuela y las que debe cumplir para hacer parte de este grupo social, por otro lado, al ser rechazado y acosado por un grupo de personas, genera conflictos que afecta la autoestima y autonomía del individuo lo que le hace desertar.

Sin embargo, los grupos de iguales también pueden ser un factor protector y proporcionar apoyo a los demás, ante situaciones de motivación y acompañamiento escolar, como por ejemplo utilizar el plan padrino en materias que se le dificulten a otros estudiantes y así disminuir las posibilidades del fracaso escolar y por ende la deserción.

Los medios masivos de comunicación constituyen una fuente de gran influencia en la socialización de las distintas situaciones que presenta la sociedad a nivel, regional, nacional o internacional, y provee información frente a las situaciones que se presenta, por lo que se proporciona diferentes percepciones de la realidad en la que se vive, lo cual afecta de forma directa o indirectamente a los individuos.

Es así como los agentes de socialización (profesores, padres, vecinos, amigos, entre otros) forman parte de las acciones y decisiones de los estudiantes hacia el abandono o permanencia en la institución educativa, pues mediante la interacción con ellos, generan herramientas que podrán permitirles aprovecharlas en la disminución de este fenómeno.

Es importante que los agentes socializadores formen parte del proceso de educativo de manera activa y continua, pues mediante la comprensión, acompañamiento, supervisión, motivación y apoyo hacia los estudiantes, se ayudará a mejorar la situación que se está presentando.

“La educación, en cualquier etapa del desarrollo social, tiene la función de socializar a las nuevas generaciones; lo cual significa, prepararlas para vivir en sociedad, para convivir como ciudadanos responsables, capaces de cumplir funciones cívicas y poseedores de un sistema de valores que le permita actuar en correspondencia con su contexto social.

La educación como actividad sistemática, está llamada a formar a las personas en su condición de ciudadano. Destacando esta función de la educación, el Doctor en Ciencias Fabelo (2003 ), señala que educar significa socializar, es decir, transformar al educando en un ser social, en parte constitutiva de una comunidad humana particular, único modo posible para hacerlo representante y partícipe del género humano” ( Altavaz, 2012 : 28).

  • La educación es el deber que le corresponde cumplir tanto a la escuela, como a la familia y a la comunidad, pues estas están encargadas de trasmitir conocimientos, costumbres, creencias, ideales, etc;
  • , que ayudan al individuo a relacionarse con sus entornos;
You might be interested:  Como Podemos Usar Las Redes Sociales En La Escuela?

El rol de la familia en la educación de los estudiantes no solo se centra en participar de las actividades académicas dentro de la institución educativa, sino también en ser mediadores de aprendizaje, es decir, apoyarlos y acompañarlos en este proceso.

Los docentes deben tener la capacidad de escuchar dudas e inquietudes, para así orientar de forma adecuada a los estudiantes, así asumen un papel de apoyo, comprensión y motivación en el aula de clase, en la cual se plantean diversas formas de enseñanza y adaptación de los individuos, para evitar la deserción escolar.

Se requieren maestros comprometidos, que trabajen en el logro de mejores resultados de aprendizaje, que crezca el conocimiento intelectual del alumno, que busquen entender, ayudar y sacar adelante al estudiante para que encuentre una empatía con el sistema educativo.

  • El educador debe ser el facilitador, colaborador y orientador del aprendizaje del educando, por lo tanto, es el responsable de la calidad de la enseñanza junto con el hogar y las autoridades educativas;

Acosta expone que: “El maestro debe interactuar con las instituciones y los padres de familia en lo que se refiere a las metas de desarrollo integral del niño. Ser docente de educación inicial es tener la oportunidad de enfrentarse cada día a una caja de sorpresas: una sonrisa, el llanto, un logro, un interrogante difícil de responder, situaciones que hacen del ejercicio académico un rol gratificante y un reto permanente” ( Acosta, 2016 : 5).

Parta Vergara “Los actores motivan al estudiante para permanecer en la institución educativa, se relacionan con el apoyo que obtiene de su núcleo familiar para desempeñar sus actividades académicas, su relación con compañeros de clase y la misma institución, la cual juega un papel importante y hace que el estudiante sienta ese deseo de asistir y permanecer por compartir espacios de conocimiento y recreación, y también el acercamiento y la relación que pueda establecerse entre el docente y el estudiante, que en gran forma genera un vínculo que ayuda a su continuidad en el ciclo educativo” ( Vergara, 2014 : 18).

La relación de estos actores, garantizan el proceso de enseñanza-aprendizaje, proporcionando apoyo, comprensión, motivación, asistencia, trabajando de manera conjunta, para lo cual debe existir una comunicación asertiva entre estas partes, de esta forma habrá mayor entendimiento y se podrá actuar desde las posiciones de cada actor.

Según Navarro “La relación escuela-familia se plantea desde la escuela porque a esta le interesa que sus esfuerzos sean adecuadamente complementados por los actores no-escolares (la familia) que pueden, sin embargo, cumplir un rol educativo.

A la inversa, para la familia, el desempeño de la escuela es importante puesto que espera que los aprendizajes escolares sean también aprendizaje para la vida, esto es, que resulten aplicables al desempeño actual y futuro del estudiante fuera de la escuela” ( Navarro, 2004 : 71).

  1. Mientras que la comunidad ha optado por ser un espectador ante la educación de los individuos, expone situaciones que lo motiva a los estudiantes a dejar de estudiar como lo es la falta de oportunidades, tanto para él, como para la familia, también pueden adquirir dinero fácil mediante situaciones ilegales, la aceptación de un grupo social los incita a desertar y muchos factores más que dan paso a este fenómeno;

La comunidad debe ser quien esté pendiente y apoye el trabajo con los individuos ante el proceso de educación, es decir, velar por el cumplimiento de este derecho fundamental. También este contexto debe generar y aumentar oportunidades para el individuo y su familia, promover herramientas de afrontamiento ante situaciones conflictivas.

Este contexto le permitirá al individuo tener herramientas para continuar con el proceso de aprendizaje. La relación de la escuela, la familia y la comunidad debe propiciar el desarrollo y crecimiento de cada individuo, pues estos entornos le permiten socializarse en distintas situaciones, generando un aprendizaje basado en las vivencias cotidianas.

Asimismo, esta relación demuestra que los entornos nombrados, proporcionan espacios de aprendizaje, comparten responsabilidades a la hora de formar nuevas generaciones y afrontan diversos retos en el momento de educar de manera conjunta a los individuos.

  • Esta relación se convierte tanto en un derecho como un deber colectivo, es decir, que todos podemos acceder a la educación, pero debemos cumplir con algunas obligaciones como acompañamiento y apoyo familiar, motivación, mejoramiento de la pedagogía escolar, cumplimiento de las obligaciones académicas, aumento de oportunidades, entre otras;

La relación entre las familias, las escuelas y la comunidad debe basarse en el apoyo, acompañamiento y conservación de la comunicación asertiva, para velar por un buen desempeño en los estudiantes, lo que permitirá garantizar el derecho a la educación, promover pautas y estrategias educativas que mitiguen la deserción escolar en las instituciones.

CONCLUSIONES La escuela constituye el núcleo central y primordial de la educación; tanto en la comunidad como en la familia, por tanto, su papel como institución está enmarcado en dos direcciones una formar y la otra preparar, para lograr la formación integral del hombre para la sociedad en la cual se va a desenvolver.

La interacción entre maestro y estudiante se debe desarrollar a nivel académico y a nivel personal, lo que contribuye a que los estudiantes generen confianza hacia su docente y puedan desarrollar habilidades sociales que permiten una mejor comunicación y comprensión En esta relación el objetivo es que el maestro acompañe al estudiante y le de herramientas para afrontar situaciones, además de revelar la importancia de la educación y de un proyecto de vida que defina y aclare las aspiraciones individuales La escuela y los maestros se convierten en un elemento fundamental en el desarrollo del estudiante, al brindar herramientas para afrontar situaciones de la vida Ante la deserción escolar, las instituciones deben generar nuevas prácticas educativas que atraigan a los estudiantes y les brinden confianza y estabilidad, lo cual puede estimular deseos de permanecer en la escuela y buscar alternativas para no desertar de esta, lo cual debe ser contenido esencial del trabajo educativo..

¿Qué es lo que se aprende en la escuela?

Las primeras etapas de aprendizaje de los niños son difíciles y pueden surgir algunas dudas de a quién le corresponde cada tarea. Qué aprenden los niños en el colegio y qué aprenden en casa no es algo que esté delimitado y eso puede suponer un problema para el desarrollo del niño.

Y sin olvidar en ningún momento que la responsabilidad educativa del niño recae primeramente sobre los padres, podemos establecer en líneas generales cuál es la tarea del colegio y cuál la de los padres.

Te contamos qué aprenden los niños en el colegio y en casa. Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela Antes de llegar a Preescolar , la mayoría de los niños han pasado ya alguna temporada en la guardería , que es el lugar ideal para que los más pequeños practiquen tareas de motricidad, atención y sociabilidad. Una vez en Preescolar, los niños empiezan a identificar las letras , los números, las formas y los colores. En esa misma etapa educativa, los niños son capaces de aprender a unir letras, a identificar palabras y a leer textos sencillos. Igualmente pueden aprender a hacer cuentas básica , como sumar y restar, sin olvidarnos de otras facetas del aprendizaje básico como pueden ser las manualidades simples para relacionar objetos y pintar para identificar las formas y los colores.

Es tarea del colegio desarrollar en los niños todas aquellas habilidades básicas que necesitarán a lo largo de toda su vida académica o social. Es decir, aprender a leer, a escribir, a contar. pero también a compartir, respetar y vivir en sociedad.

Sin embargo, que los niños acudan al colegio no exime a los padres de su responsabilidad educativa. De nada sirve que un niño aprenda a identificar la letra A, si cuando llegue a casa ese aprendizaje no se refuerza. Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela Por eso insistimos en la responsabilidad educativa de los padres. Claro que la mayoría de las personas no están dotadas de conocimientos pedagógicos, pero con un poco de intuición , todo el mundo puede reforzar lo aprendido en el cole. Jugar a identificar las letras que el niño va a aprendiendo observando los letreros comerciales, por ejemplo, es una forma muy divertida para que el niño continúe aprendiendo sin esfuerzo.

Recordar en casa los números a base de canciones y hacer sencillos cálculos con objetos es una buena forma de que el niño afiance sus conocimientos. Y por supuesto no podemos olvidarnos de los valores que debemos inculcar a nuestros hijos.

El desarrollo de su personalidad, la autoestima, la seguridad, la tolerancia y el respeto es tarea fundamentalmente de los padres. No podemos pretender enviar a nuestros hijos al colegio y que regresen a casa con el abecedario aprendido, sabiendo dar la hora o contando los caramelos que tienen en bolsillo y además de eso, que sean personas educadas, respetuosas, ingeniosas, tolerantes y sociables.

Porque los primeros años del niño son un aprendizaje continuo y esa labor es, sobre todo, de los padres. Puedes leer más artículos similares a Qué aprenden los niños en el colegio y en casa , en la categoría de Aprendizaje en Guiainfantil.

com..

¿Que decirle a un niño que no quiere ir a la escuela?

Durante las primeras semanas de clases es normal que tu hijo no quiera ir a la escuela , es decir, iniciar el colegio, y es que hablamos de retomar una rutina que, durante las vacaciones, dejamos a un lado. Pero cuando esta negativa del niño a asistir al colegio sucede habitualmente, es importante detectar qué puede estar ocurriendo. Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela La negativa de los niños a ir al colegio suele estar basada en un miedo irracional , que suele aparecer por primera vez en niños que asisten a escuelas infantiles de edad preescolar, siendo más frecuente en los que cursan el segundo grado. Para manifestar su disgusto por asistir al colegio , el niño suele quejarse de dolores de cabeza, de garganta o de estómago justo antes de la hora de partir hacia la escuela. La ‘enfermedad’ mejora cuando se le permite quedarse en la casa, pero reaparece a la mañana siguiente antes de ir al colegio de nuevo.

Si estás pasando por esta situación, en Guiainfantil. com te indicamos a qué señales debes prestar especial atención, es decir, cuáles son las posibles causas , y te ofrecemos algunos consejos que puedes aplicar para que el niño recupere la ilusión por ir al colegio.

En algunos casos, el niño puede negarse por completo a salir de la casa y, para eso, utilizará todas las estrategias a su alcance como llorar y reaccionar con una rabieta. Hay varios aspectos que debes tener en consideración en el momento de indagar en las razones por las cuales tu hijo no quiere asistir al colegio.

– ¿Ha tenido tu hijo algún problema en el colegio? Lo primero que debes hacer es investigar si tu hijo ha tenido algún problema en el colegio , bien sea con sus profesores, compañeros de clases o cualquier otra persona de la institución.

Cuando vayas a hacerlo procura tener mucha calma y hablar con un tono de voz amable. De esta manera, tu hijo se sentirá seguro para hablar. Explícale que no te molestarás ni lo castigarás por decirte si ocurre algo malo; hazle saber que puede confiar en ti.

– ¿En qué momento tu hijo dejó de querer ir a la escuela? Esto es algo que puedes hacer por tu cuenta. Simplemente, piensa un poco en cuándo empezó tu hijo a no querer ir al colegio. Esto te será de gran ayuda para investigar si algo le pasó.

Trata de recordar los eventos que sucedieron en esa época. No necesariamente se puede tratar de problemas en el colegio, muchas veces los niños al no saber cómo gestionar sus emociones de manera adecuada , tienden a llevarlo a otros ámbitos. Recuerda si ha habido cambios significativos en su dinámica, problemas familiares o cualquier tipo de situación de interés antes de que empezara a negarse a ir a clase.

  1. – ¿Ha habido cambios en casa o en el ambiente familiar? Esta actitud es muy frecuente en los primogénitos, sobre todo, cuando tras la llegada de un hermanito ven como él debe salir de casa, mientras su mamá se queda al cuidado del hijo menor;

La negación de ir a la escuela puede aparecer también después de un período en el que el niño ha estado en casa en compañía de su mamá, por ejemplo, después de las vacaciones de verano, de unos días de fiesta o después de una breve enfermedad. – ¿Le sucede solo a mi hijo? Indaga con los demás padres si hay otros niños que no quieran ir al colegio.

De ser así, es posible que se deba a algún conflicto con algún profesor o un compañero de clase. – Descarta otros problemas Por último, pero no por eso menos importante, trata de descartar que no exista algún problema médico.

Ten en cuenta si tu hijo ha presentado últimamente otros síntomas y, de ser así, consulta con su médico pediatra para que te oriente al respecto. Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela Si tu hijo tiene este problema, no te preocupes, aquí te explicamos  cómo puedes ayudarle : – La buena comunicación con el niño es clave Mantener una comunicación abierta con tu hijo es fundamental para ayudarlo con cualquier asunto que se le presente en la vida. Es importante que sienta confianza para hablar contigo de lo que le sucede. Al hablar utiliza siempre un tono de voz calmado , incluso si te llegas a alterar (eso pasa, ¡somos humanos!). Si es así, respira con calma y continúa escuchándole. Fomenta esta comunicación como parte normal de su rutina, no solo en momentos específicos.

Pregúntale a diario cómo le ha ido , qué hizo y cómo se lleva con sus compañeros. De esta manera, le resultará natural hablar contigo cuando suceda algo que le moleste o incomode de alguna manera. – Observa su conducta Debes estar pendiente ante cualquier cambio conductual que tenga tu hijo, esto es un claro indicio de que algo no anda bien.

Si notas que se comporta de manera diferente, indaga más al respecto. Puede que no lo diga con sus palabras, pero puede ayudarle dibujar o utilizar juguetes para mostrar lo que le ocurre. Es necesario que aprendas a leer las señales que indican que a tu hijo le está sucediendo algo e invitarle a contarte, nunca de manera obligada ni bajo presión.

You might be interested:  Como Saber En Que Escuela Quedo Mi Hijo?

– Valida sus emociones Cuando tu hijo expresa el no querer ir al colegio en lugar de enfocarte en decirle que todo estará bien y que nada va a pasar, lo primero que debes hacer es validar lo que siente.

Puedes decirle frases como: ‘sé que te sientes un poco nervioso (triste, enojado, etc. ) y está bien, pero al llegar a clase verás que todo estará bien’. Ayúdale a nombrar eso que siente; puede que le cueste expresarlo simplemente por no saber cómo hacerlo.

Por esta razón, es muy importante que trabajes con tu hijo su lenguaje emocional para que tenga las estrategias necesarias para contarte lo que siente. – Las rutinas ayudan Una de las estrategias más útiles para ayudar a tu hijo en cualquier situación es crearle rutinas estables en las cuales sepa con certeza lo que sucederá.

Incluye todo lo que sucede en su vida, no solo lo concerniente al colegio. Incluye horarios de juego, de tarea, de aseo personal , etc. Dentro de las rutinas, también debes tener en cuenta explicarle que lo vas a dejar en el colegio y tendrá clases, compartirá con sus amigos y que luego tú (u otro responsable) lo irá a buscar al salir.

Recuérdale lo mucho que le amas , el orgullo que te hace sentir y deséale un buen día en clases. – Habla con sus profesores Acércate a sus profesores y pregúntales cómo le va a tu hijo, si se lleva bien con sus compañeros o si ha sucedido algo fuera de lo común.

Ellos pueden darte información valiosa para comprender las razones por las que tu hijo no quiere asistir al colegio. Es importante que te cerciores de que el ambiente escolar sea adecuado para el aprendizaje de tu hijo, un sitio seguro donde se sienta bien , sin miedos ni incertidumbres que le causen estrés o ansiedad. Que Pasa Con Los Niños Que No Van Ala Escuela Los niños con un miedo irracional hacia la escuela pueden sentirse inseguros si se quedan solos en una habitación. También pueden demostrar un comportamiento de apego hacia sus padres e incluso convertirse en su sombra, siguiéndoles a todas partes. Estos miedos son comunes en niños que padecen el llamado ‘ desorden de ansiedad ‘. Además, presentan dificultad para dormir, un miedo exagerado y un temor irreal hacia los animales, monstruos, ladrones o a la oscuridad.

– Pide ayuda profesional Si la situación con tu hijo continúa sucediendo y a pesar de intentar indagar acerca de lo que le pasa no encuentras respuestas, es importante solicitar la ayuda de algún profesional como un psicólogo infantil (o juvenil) o un orientador.

Los efectos potenciales a largo plazo pueden ser muy serios para un niño con miedos persistentes, si no recibe atención profesional. El niño puede desarrollar serios problemas escolares y sociales, si deja de ir a la escuela o ver a sus amigos por mucho tiempo.

Antes de que eso pueda ocurrir, los padres pueden ayudar a su hijo llevándolo a un psicólogo de niños y adolescentes, quien trabajará con él para que vuelva de inmediato a la escuela y realice otras actividades diarias.

Algunos niños requieren un tratamiento extensivo para determinar las causas del miedo. Los niños mayores o los adolescentes que se niegan a ir a la escuela requieren un tratamiento aún más intensivo. En cualquier caso, el miedo irracional de abandonar la casa y la compañía paterna o materna se puede tratar con éxito.

¿Qué dice el Ministerio de Educación sobre las clases presenciales?

  • Destaca esfuerzo de maestros y padres de familia para crear mejores condiciones para escolares que vuelven a las aulas.

El ministro de Educación, Rosendo Serna, señaló que el retorno a clases es una necesidad y el compromiso de los maestros del Perú y de toda la comunidad educativa es que este 2022 sea efectivamente el año de retorno a las clases presenciales y de la recuperación y mejora de los aprendizajes. Desde Ucayali, donde cumple diversas actividades de supervisión y fiscalización de instituciones educativas, Serna destacó el esfuerzo y la voluntad de maestros y padres de familia del Perú profundo para superar algunas adversidades y carencias y crear las mejores condiciones para el estudio de nuestros niños y jóvenes.

  • “Hoy es el primer día en el que los maestros nombrados y directores vuelven a las aulas para proyectar el año escolar 2022 y trabajar a favor de la educación;
  • Estoy seguro de que con creatividad e ingenio ayudarán a superar las carencias en las zonas críticas y desde el Ministerio de Educación (Minedu) priorizaremos una mayor inversión para zonas rurales y de difícil acceso”, afirmó;

Cabe señalar que hoy, 1 de marzo, 145,046 docentes contratados volvieron a sus aulas luego de dos años de iniciada la pandemia, y mañana lo harán 236,219 profesores nombrados en las instituciones públicas de todo el país. Serna señaló que la mayoría de los 2,370 directores de servicios educativos de Ucayali han avanzado con el mantenimiento de sus respectivos locales y la adquisición de kits de higiene y les pidió que aceleren los procesos de rendición de cuentas de los presupuestos ante la UGEL de su jurisdicción porque el Minedu les destinará más recursos en los próximos meses.

De otro lado, reiteró su exhortación a la comunidad educativa para que complete la vacunación contra el COVID-19 y sostuvo que la vacuna es la mejor respuesta para enfrentar el coronavirus, como ha quedado demostrado con la tercera ola de la pandemia.

Según los últimos reportes de vacunación del Ministerio de Salud, el 92. 2 % (13,065) de docentes y personal administrativo de Ucayali está vacunado con una dosis, el 78. 1 % (11,059) tiene dos dosis, mientras que solo el 28. 4 % (56,146) de escolares entre 5 y 17 años de edad cuenta con una dosis y un 20.

4 % (40,221) tiene dos dosis. Acompañado por las congresistas Jenny López y Francis Paredes y la directora regional de Educación, Juana Tello, en las primeras horas de la mañana el ministro de Educación se trasladó por vía fluvial al centro poblado 11 de Agosto, en la provincia de Coronel Portillo, para visitar la IE Nº 64646.

En ese lugar, Serna recibió a un grupo de niños de localidades aledañas que llegaron al colegio navegando en una frágil embarcación y tuvo un emotivo encuentro con maestros y padres de familia, que destacaron el hecho de que por primera vez un ministro de Educación llegaba a ese centro poblado.

Luego, se trasladó, también por vía fluvial, al centro poblado San José para visitar el colegio secundario Carlos Cueto Fernandini, donde dialogó con un grupo de padres de familia que le solicitó la construcción de más aulas.

Serna les ofreció el apoyo del Minedu y les pidió que prepararan el expediente técnico para poner en marcha el proyecto. Posteriormente, visitó los colegios San Francisco, Elías Aguirre, Faustino Maldonado, Daniel Alcides Carrión y San Fernando, y también la IE Horacio Zeballos, donde hay un conflicto, ya que en un mismo local funcionan un instituto superior y un colegio de educación básica regular.

¿Cómo se le llama a las personas que no asisten a la escuela?

Referencias [ editar ] –

  1. ↑ [ http://buscon. rae. es/draeI/SrvltGUIBusUsual?TIPO_HTML=2&TIPO_BUS=3&LEMA=internado Definición de internado en el Diccionario de la lengua española , editado por la Real Academia Española.
  2. ↑ Acepción número cuatro, en el Diccionario de la lengua española , editado por la Real Academia Española, de internado. (Consultado jueves 5 de octubre de 2017)
  3. ↑ Sobre los internados (Unicef)
  4. ↑ Bamford T. (1967) Rise of the public schools: a study of boys public boarding schools in England and Wales from 1837 to the present day. Londres: Nelson, 1967.
  5. ↑ Cadete de Linton Hall, Memorias de la Escuela Militar de Linton Hall: One cadet’s memoir, Arlington, VA. : Scrounge Press, 2014 ISBN   978-1-4959-3196-3
  6. ↑ Story, Louise (17 de agosto de 2005), «Un negocio construido sobre los problemas de los adolescentes» , The New York Times.
  7. ↑ «¿Qué es TGS?». Think Global School. Consultado el 15 de septiembre de 2014.
  8. ↑ «¿Qué es TGS?».
  9. ↑ «Programa de Terapia de la Naturaleza, Internado Terapéutico para Niños con Problemas». Academia Woodcreek. Consultado el 30 de mayo de 2014.
  10. ↑ «La historia de Oregón. Rural Voices: Tres días en Crane. Crane High School – OPB».
  11. ↑ «Archived copy». Archivado desde el original el 14 February 2006. Consultado el 11 de diciembre de 2005.

¿Cuántas faltas puede tener un alumno de primaria 2022?

I-CAPÍTULO: Régimen de Asistencia y cómputo de inasistencias Art. 1- Todos los alumnos tienen la obligación de ingresar al establecimiento antes del toque de timbre. Art. 2- La asistencia se computará por día hábil. Art. 3- Se computará doble inasistencia  cuando no asista, por lo menos, la tercera parte de la división y se compruebe que estas inasistencias fueron por decisión colectiva.

Para la aplicación de esta medida no se tomará en cuenta a los alumnos que estén ausentes y justifiquen su inasistencia por enfermedad. Art. 4- Se computará una inasistencia en los siguientes casos: –       No concurrencia al turno correspondiente.

–       Ingreso después de transcurrido los primeros quince minutos de clase. –       Retiro del establecimiento antes de la última hora de clase. Art. 5- Se computará media inasistencia en los siguientes casos: –       Ingreso hasta quince minutos después de iniciadas las actividades correspondientes.

–       Retiro del establecimiento dentro de la última hora de clase. Art. 6- La dirección adoptará los recaudos necesarios para mantener informados permanentemente a los padres, tutor o encargado, sobre las inasistencias y tardanzas de sus hijos.

El informe será quincenal. II-CAPÍTULO: Justificación de inasistencias  y tardanzas. Art. 7- Los padres, tutor o encargado deberán presentar la solicitud de justificación dentro de las 48 hs (cuarenta y ocho horas) de producida la inasistencia o tardanza. Art. 8- Se consideran justificadas las inasistencias por las siguientes causas: –       A- Enfermedad:

  •   Cuando presente certificado expedido por padres, tutor o encargado hasta 2 días.
  •   Cuando el certificado sea expedido por médico por inasistencias de 3 días o más.
  •   Cuando el certificado sea expedido por médico y visado por la Dirección General de Higiene, seguridad y medicina del trabajo: en caso de que la enfermedad necesite reposo obligatorio u otro problema de salud que exija inasistencia prolongada.

–       B- Por enfermedad de algún miembro del grupo familiar que requiera de la atención del alumno, lo que será certificado según los requisitos fijados en el punto A. –       C- Por fallecimiento de miembro del grupo familiar. –       D- Por causas que a juicio de la Dirección sean insalvables y ajenas a la voluntad del alumno, fehacientemente comprobables. NOTA: – La Dirección podrá solicitar la comprobación de las inasistencias por enfermedad propia o familiar, a la Dirección General de Higiene, Seguridad y Medicina del trabajo.

Las inasistencias  y tardanzas serán justificadas a través de un formulario pre-impreso, que podrá ser adquirido en fotocopiadora. III-CAPÍTULO: Pérdida de regularidad. Reincorporaciones. Art.

9- El alumno perderá  por primera vez su condición de regular, cuando acumule  20 (veinte) inasistencias. Art. 10-El alumno que pierda su condición de regular, por haber cumplido el máximo de inasistencias establecidas en este reglamento, deberá presentar dentro de las 48 (cuarenta y ocho) horas de producida la pérdida de regularidad,   una solicitud suscripta por padres, tutor o encargado.

Mientras se cumpla el trámite correspondiente al pedido de reincorporación, el alumno deberá seguir asistiendo a clases y se registrarán debidamente sus asistencias, inasistencias, tardanzas y retiros.

Art. 11-El alumno que pierda por primera vez su condición de regular, será reincorporado por la Dirección, siempre y cuando cumpla con las siguientes condiciones:   –       Haber  justificado el 75 % (setenta y cinco por ciento) de las inasistencias, lo que representa 15 (quince) inasistencias.

De ellas, por lo menos 10 (diez) deben haber sido motivadas  por  razones de salud. –       No sumar  al momento de presentar la solicitud, sanciones disciplinarias que excedan los siguientes límites:10 (diez) amonestaciones o 2 (dos) días de suspensión, o 5 (cinco) amonestaciones y  1  (un) día de suspensión.

–       Tener  un  promedio general no inferior a 6 (seis) puntos. –       El alumno no reincorporado, podrá solicitar rendir todas las asignaturas como libre en los períodos corrientes. Art. 12-  Los alumnos reincorporados por primera vez podrán acumular hasta 10 (diez) inasistencias más, cumplidas las cuales perderán por  segunda vez la condición de alumno regular.

  1. Art;
  2. 13-  Los alumnos podrán ser reincorporados por segunda vez si las nuevas 10 (diez) inasistencias son justificadas, 5 (cinco) de las cuales por certificado médico;
  3. Los padres o tutores  de estos alumnos deberán ser oportuna y fehacientemente informados de esta situación;

Art. 14-  Los alumnos reincorporados por segunda vez podrán acumular hasta 5 (cinco) inasistencias más, excepto los que inasistieron en forma prolongada según lo previsto en el Art. 8, inciso A, a los que se les otorgarán  15 (quince) inasistencias más. Art.

15-  Los alumnos reincorporados por segunda vez, al cumplir las nuevas 5 (cinco) inasistencias, pierden para el resto del año su condición de regular. Para aprobar el año, deberán rendir como libre todas las asignaturas.

No quiero ir a la escuela – Cuento Infantil en Español

– Art. 16-  Los alumnos que cumplieran 15 (quince) inasistencias por enfermedad prolongada antes del mes de octubre, pueden continuar asistiendo y deben aprobar en el plazo de un mes, un examen global de cada asignatura con los temas esenciales enseñados durante su inasistencia total.

  1. Estos exámenes deben ser aprobados con 7 (siete);
  2. Si aprueban se le otorgan  hasta 5 (cinco) inasistencias más;
  3. Si no aprueban alguno de estos exámenes, o quedan libre por tercera vez, después del mes de octubre, o quedan libres por cuarta vez,  los alumnos deberán rendir exámenes finales, a partir de diciembre, en calidad de alumno regular;

Art. 17- Si los alumnos mencionados en el Art. anterior que deben pasar el examen final, tuvieran buen rendimiento o comportamiento, el Consejo de Escuela, sobre la base del informe de los profesores del curso y del SAOPS, podrá otorgar las siguientes facilidades para rendir los exámenes: –                       Aprobar entre diciembre y marzo sólo las asignaturas que tengan correlativas en el año subsiguiente.

  1. El Consejo de Escuela determinará las asignaturas para cada caso;
  2. –                       Aprobar en los restantes períodos de exámenes ya establecidos, las restantes asignaturas, a partir de lo cual se encuadra en la normativa común vigente;

–                       Otorgar la posibilidad de repetir el año,  haciendo o no rendir algún examen, incluso a los alumnos de primer año. Art. 18-  La autoridad escolar resolverá la situación de cada alumno en un plazo no mayor de 7  (siete) días a partir de la notificación del alumno libre, a los padres, tutor o encargado.